El Viento del Norte y el Sol
El
Viento del Norte y el Sol disputaban sobre sus poderes y decidieron conceder la
palma del triunfo al que despojara a un viajero de sus vestidos.
El
Viento del norte empezó de primero, soplando con violencia, y apretó el
hombre contra sí sus ropas. El Viento del Norte asaltó entonces con más fuerza,
pero el hombre, molesto por el frío, se
colocó otro vestido. El Viento del Norte, vencido, le dio oportunidad al Sol.
Este
empezó a iluminar, suavemente, y el
hombre se despojó de su segundo vestido. Luego, lentamente, le envió el Sol sus rayos más ardientes, hasta
que el hombre, no pudiendo resistir más el calor, se quitó sus ropas para ir a
bañarse en el río vecino.
Moraleja: Es mucho más poderosa la persuasión
que la violencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario